Una de las peores sequías en un siglo, agravada por los altos precios y la lucha política sin tregua, está generando una enorme crisis humanitaria en el Cuerno de África. Miles de somalíes huyen de su país cada semana, la mayoría de los que sobreviven al final del viaje brutal en los campamentos de refugiados en la vecina Kenia. Las agencias de ayuda están pidiendo recursos para sobrellevar la peor sequía en 60 años. Aunque se centra en Somalia, que carece de un gobierno que funcione y sufre de constantes batallas con los rebeldes islámicos, la crisis también ha afectado a personas en Yibuti, Etiopía, Kenia y Uganda. Los informes sugieren que algunas partes de Somalia puede estar ya al borde de la hambruna, una repetición de la situación de emergencia hace dos décadas. Los recursos son lamentablemente inadecuados. "Hambruna desesperada se cierne sobre todo el Cuerno de África y amenaza las vidas de millones de personas que están luchando por sobrevivir en la cara de los precios de los alimentos y los conflictos", dijo Josette Sheeran, director ejecutivo del Programa Mundial de Alimentos en un comunicado de Prensa. "Me duele el dolor ajeno" dijo José Luis Ávila Herrera. (Ver todas las fotos)